miércoles, 22 de abril de 2009

Clint Eastwood, la última opción


La película 'Harry el Sucio' encumbró definitivamente al bueno de Clint Eastwood. Su estampa se asocia al Magnum .44 de Smith & Wesson del mismo modo que su personaje se convirtió en el arquetipo de "poli de gran rectitud moral pero con métodos expeditivos", un modelo que se repitió hasta la saciedad durante el cine Reagan de los años 80 (Bruce Willis en 'La Jungla de Cristal'; el recientemente divorciado Mel Gibson en 'Arma Letal'; Charles Bronson; Jean-Claude Van Damme; Chuck Norris...).
Sin embargo, Clint Eastwood no fue ni mucho menos la primera elección de los productores para el papel principal, que fue escrito para Frank Sinatra (quien tenía unos 60 años por aquel entonces). Pero Sinatra se lesionó la muñeca poco antes del rodaje y era incapaz de sujetar el pistolón que debía usar Harry Callahan, por lo que se buscó a otro actor. ¿Eastwood? No: John Wayne. Pero a John Wayne le pareció que la película contenía demasiada violencia y rechazó el papel. Entonces recurrieron a... ¿Clint Eastwood? No: a Paul Newman. Pero a Paul le pareció que la ideología que defendía el teniente Callahan no coincidía con sus propias ideas políticas (más liberales) y también rechazó el papel. Fue entonces cuando, a sugerencia del propio Newman, le ofrecieron el papel a Clint Eastwood. Éste, más joven que los anteriores candidatos, exigió que se reescribiera el guión (en principio, Callahan estaba a punto de jubilarse) para que la acción transcurriera en la ciudad en la que vivía por aquel entonces (San Francisco) e impuso como director a Don Siegel. ¿Cómo habría sido la película con otro actor?
Esta pregunta también me la hago con otra película mítica: 'Acorralado', la primera peli de Rambo. ¿Sabéis a quién le ofrecieron el papel los productores antes de escoger a Stallone? ¡A John Travolta y a Dustin Hoffman! ¿Dustin Hoffman repartiendo mamporros en plan máquina de matar? Dios Santo...

viernes, 3 de abril de 2009

Walt Whitman, el padre del verso libre


Walt Whitman (1819-1892) fue un poeta y periodista estadounidense que trabajó como camillero voluntario durante la Guerra de Secesión y que rompió los esquemas clásicos de la poesía, tanto en lo referente al contenido como a la forma. Está considerado el padre del verso libre y en él se han inspirado una buena jauría de juntaletras: T.S. Eliot, Pablo Neruda, Jorge Luis Borges, Wallace Stevens...
Whitman es recordado por una única obra, un libro de poemas: 'Hojas de Hierba'. Lo publicó en 1855 y, desde entonces, ha sido editado una y otra vez hasta nuestros días. Lo revolucionario de la obra de Whitman fue que buscaba acercar la poesía al pueblo llano, alejándola de las farragosas rimas y la métrica constrictora (lo cual, para qué engañarnos, también facilita enormemente la labor del autor a poco perezoso que éste sea). Con Whitman, a los nuevos poetas se les abrió el cielo: "¿Versos libres? ¡Estupendo! ¡Hagamos lo que nos dé la gana!". Actitud con la cual estoy de acuerdo, aunque personalmente siempre he preferido la prosa –Juan Ramón Jiménez es el claro ejemplo de que la prosa puede ser tan poética como la poesía misma, a la vez que otorga libertad absoluta–.
Por último, quiero destacar una gran frase de Whitman: "No me cabe duda que merecí a mis enemigos, pero no creo haber merecido a mis amigos".